"Las Coplas del Espartero", vals peruano dedicado al gran torero español de finales del siglo XIX. Manuel García Cuesta, que era el nombre de "El Espartero", fue un torero nacido en Sevilla en 1865, falleció en la Plaza de Toros de Madrid, el 27 de Mayo de 1894, a consecuencia de la cogida mortal que le infirió el toro "Perdigón", de la ganadería de Miura.
"El Espartero" tenía fama no sólo de buen torero y valiente, sino también de generoso. Fue uno de los toreros más populares de su tiempo y sobre él se contaban mil anécdotas, como la célebre frase que se le atribuye:
«Mas cornás da el hambre», entre otras. La muerte de "El Espartero", a la temprana edad de 29 años, causó conmoción en España e incluso traspasó fronteras, como en el Perú y en muchas partes del mundo.
Esta brillante interpretación de Los Troveros Criollos (Humberto Pejovés, Lucho Garland y Pepe Ladd) fue grabada en Lima en 1958. La letra y melodía de esta versión provienen de una jota aragonesa, de la provincia de Zaragoza, de finales del siglo XIX, y fueron corregidas y aumentadas con las de romances populares de la época dedicados, a raíz de su mortal cogida, al famoso diestro sevillano, a comienzos del siglo XX, por la Guardia Vieja del Perú.
A continuación enlazamos el tema original, melodía atribuida a Isidoro Tarazona, gaitero de esta localidad zaragozana, a finales del siglo XIX. Esta versión fue interpretada como vals criollo por personajes de la Guardia Vieja de Lima. En este vídeo, son los hermanos Alejando y Ricardo Govea, dúo que alcanzó gran popularidad en el Perú en los años 40.
Soy Tarazona el Gaitero
que ha venido de Alcalá
para cantar una copla (ay ay ay)
música la de mi pueblo.
Adiós, ya me voy,
no me habéis conocido ni sabéis quién soy.
De verde y oro vestía
el simpático torero
llamado Manuel García (ay ay ay )
apodado El Espartero
Adiós, ya me voy, . . .
El toro era un criminal
de las dehesas de Miura
que al tauromaca valiente (cómo no)
lo llevó a la sepultura.
Adiós, ya me voy, . . .
Cuatro caballos jalaban
la carroza del torero.
Los sevillanos lloraban, (ay ay ay)
la muerte del Espartero.
Adiós, ya me voy, . . .
Hoy los toritos de Miura
ya no le temen a nada
porque murió el Espartero (ay ay ay)
el que mejor los mataba.
Adiós, ya me voy, . . .
Hazme una torta María
aunque sea de centeno
que de tus manos María (ay ay ay)
cualquier trigo sabe bueno.
Adiós, ya me voy, . . .